...ON YOUR FACE

A veces se encuentra uno en blanco y mientras tanto se va escribiendo con tinta invisible, después, con alguna que otra turbulencia aparecen estos signos legibles que ya no identifican la realidad de nada. Nos gusta imaginar y cambiar las cosas con el paso del tiempo, lo que es y lo que nos gustaría que hubiera sido. Se tiende a adornar y tergiversar todo lo que pasa y como bien se sabe, nada es real excepto cuando pasa. No estoy seguro de lanzarme a contar algo precisamente por lo irreal de lo real y de no hacerlo ahora ya lo haré en otra ocasión cuando no me sienta tan egoísta.

El pueblo

Esa ciudad donde el frío es lo de menos, donde los ángeles vuelan desde muy lejos, donde ser longevo es una putada, donde la única opción se encierra en casa propia, donde el único placer es matarse poco a poco, donde los santos prefieren estar muertos, donde el cotilleo es el mejor pasatiempo, donde puedes caminar con los ojos cerrados sin chocarte con nadie, donde los sueños jamás se harán realidad, donde puedes llorar y culpar al frío, donde los amaneceres y ocasos son la única droga incontrolable, donde Simon y Garfunkel debieron componer los sonidos del silencio, donde ser tú mismo no permite encontrarte nunca, donde el futuro no existe por mucho que vivas, donde alguna fuerza cósmica hace que seamos más cerrados que en cualquier otra parte del planeta, donde el misticismo es la única opción turística para salir corriendo, donde los uniformes nunca se llevarán al tinte, donde la tranquilidad es una imposición, donde los que ya son viejos siempre lo han sido, donde la apariencia es todo un grado, donde los adoquines entorpecen cualquier camino, donde tanta piedra identifica los cerebros de quién manda, donde lo mejor que podría pasar estará siempre por pasar. Ávila, otro mundo.

Espacio casi infinito

Notas mayores, notas menores. No suenan las cosas igual. Las notas mayores dan un rollo más alegre y las menores, más triste. Mis canciones en un noventa por cien están en notas menores e intento invitar a las mayores. Quién toque mínimamente la guitarra sabe de lo que hablo. Y quién no la toque, sepa leer y escuchar, también. Si, me abarca la tristeza desde siempre, el "blues", y me cuesta mucho hacerlo de otra forma, pero eso no quiere decir que no me sienta alegre en infinidad de ocasiones por cualquier cosa, aunque lo que hace que me exprese sea siempre la tristeza, lo escribo o hago una canción (cuando la hago) pero soy un tipo alegre cuando hay motivos, que conste, sólo que no sé qué decir cuando llegan esos momentos. Supongo que los disfruto y me callo. Es que yo también me leo y me escucho y es la ostia, menos mal que la ironía hace de las tristezas, tristezas alegres. Esperanzadoras alegrías que no acaban de cuajar por el inconformismo que me caracteriza. Estaba escuchando una de ellas “Espacio Infinito” un intento de tristeza rota. Es lo que hice cuando lo hice.

En la ducha

Bajo la lluvia caliente de la alcachofa de la ducha, encuentro el mejor sitio para soportar la otra lluvia, la de los ojos. Un gasto de líquido casi inconfesable aunque no inútil, en el que reacciono estático mediante un caleidoscopio mental que pasa factura del mal trago. Bajo la lluvia caliente de la alcachofa de la ducha y apoyado en baldosas heladas, relajo mis músculos vitales pero no puedo con los oculares. Esa revancha natural que ilumina toscamente aquel mal paso o aquel paso equivocado. Bajo la lluvia caliente de la alcachofa de la ducha, aparece el arrepentimiento que canjeo por extravagante aprendizaje. Consciente de tal frustración siempre consigo flotar, con seguridad por la crueldad al machacarme. Bajo la lluvia caliente de la alcachofa de la ducha podría estar hasta ahogarme sólo por desahogarme, empaparme bien para lograr secarme, para soportar de por vida y con motivos tanta humedad inagotable.

eL CuArtEto dE NoS

Cojonudos...pínchalos!!
http://www.cuartetodenos.com.uy/

BLASFEMO AL CONDUCIR

No sé tío, a veces me da por pensar en cosas raras y no salgo de ahí. Anoche mismamente tardé en dormirme dándole otra vez vueltas al ...vamos coñiiio, tira palante!... sentido de la vida. Ya ves, como si realmente tuviera sentido. Volví a pensar en que cuando todo se acaba, quizás estemos en armonía fantasmagórica, felices y alejados de este grano terráqueo ...será inutil! no ves la señal gilipoyas!... en el que el tiempo existe de diferente forma, como si setenta años de aquí fueran un instante en ese otro mundo, cosas así, y además pudieras ...menudo paralítico! vamos joder!... elegir volver o no. Lo único que puedes suponer es que serás el hijo de alguien, pero el resto es libre albedrío, el destino es tuyo, bueno, un rollo en el que me fui desvaneciendo ...ese está bobo o qué?, arranca ostias!... hasta despertar esta mañana e irme a trabajar después de cuatro días de vacaciones. Y no me preguntes por qué, pero me presenté ...ese es idiota!, tiras o no, mamón!.. en una sucursal equivocada. Tenía un correo informándome de donde debía ir y al que no accedí hasta ser demasiado tarde. Como explicar que ...eh!, el intermitente cabrón!... estaba a ciento cincuenta kilómetros de donde debería estar. Y pienso que ya está bien de currar, que después de treinta y seis años en lo mismo y habiéndome ...si quieres bajo y te lo aparco yo, guapita!... quedado obsoleto en un oficio que nunca me hizo ni puta gracia, ya va siendo hora de despreocuparme y buscarle ...la madre que te parió, baboso!... un sentido más real e incluso apasionante a esta vida en la que cada vez creo menos. Aunque cuando conduzco ...será capullo!... suelo estar algo más relajado.

Deseo por deseo.

Montañas de chocolate sin fundir. La tierra sin navegar.

Tangos sin bailar. Utopía sexual entre párpados, tan cerca. Percibí la humedad. Deseo por deseo y se fue sin más. Soy el mismo y me conozco mejor, así que ya no pido perdón. Me encanta conducir aún sin BMW.